QUE PARTE DE TÚ VIDA ESTA MUERTA Y FALTA DE VIDA


Viernes 19 de abril
Viernes Santo

Permitidme que hoy os haga participes de esta reflexión de Luis María Perez creo que es el momento de reflexionar sobre nuestras relaciones de amistad con las y los demás.
Jesús ha muerto por nosotras y por nosotros, por todos y cada uno de sus hermanas y hermanos y no precisamente para que nos encerremos en nuestras capillitas personales.
Ya no nos invitamos a las casas; ahora los encuentros son en el bar o el restaurante. Ya no compartimos la intimidad del hogar. La verdad es que tenemos tantos conocidos… pero: ¿tenemos amigos de verdad, personas a las que abrimos nuestro corazón y que ellos lo abren a nosotros? En esta realidad que hoy vivimos hemos perdido profundidad en nuestras relaciones y, por lo tanto, a pesar de estar rodeados de tanta gente, nuestra soledad crece.
También esto nos sucede en nuestra vida de fe. Cumplimos con las fechas indicadas y muchas veces nos conformamos con un padrenuestro antes de dormir. Nuestra relación con Jesús es tan superficial que no tenemos idea de quién sea.
Hoy el Evangelio nos llama a buscar una relación profunda con Cristo. Hoy Jesús nos invita a quedarnos con Él en su casa, quiere que lo conozcamos, quiere que sepamos cuánto nos ama y lo felices que desea que seamos.
Agradezcamos al Señor su invitación generosa y desinteresada. Pidámosle que nos ayude a buscar una relación más profunda con Él para que, más unidos a Jesús, podamos también hacer crecer y profundizar nuestra relación con las personas que Dios nos ha puesto en nuestro camino.