Y TÚ ¿QUIEN DICES QUE ES JESÚS?


Amigo Jesús, ¡no se quien eres!
Digo amarte
cuando, media hora en tu  presencia,
me parece excesivo o  demasiado
Presumo de conocerte
y, ¡cuántas veces!
tu mensaje me pilla fuera  de juego
Te sigo y escucho
y miro, una y otra vez,
hacia caminos distantes de  Ti.

Te confieso, Jesús,
que no sé demasiado de Ti.
Que tu nombre me resulta  complicado
pronunciarlo y defenderlo
en ciertos ambientes.
Que, tu ejemplo de vida,
lo pongo con frecuencia
debajo de otros señores
ante los cuales doblo mi  rodilla

Te confieso, Señor,
que, a pesar de todo,
sigo pensando, creyendo y  confesando
que eres mi hermano Jesús.
Haz, Señor, que allá por  donde yo camine
lleve conmigo la pancarta de  “soy tu amigo”
Haz, Señor, que allá donde  yo hable
se escuche una gran melodía:  “Jesús es mi hermano”
Haz, Señor, que allá donde  yo trabaje
con mis manos o con mi mente
construya un lugar más  habitable

en el que Tú puedas formar  parte.