Domingo 23 de noviembre
34 del tiempo ordinario
Mateo 25. 31-46
¿Dónde buscamos a Dios?
34 del tiempo ordinario
Mateo 25. 31-46
¿Dónde buscamos a Dios?
¿Recordáis
el cuento de aquella mujer a la que se le cayó una moneda en la cocina y ella
la andaba buscando en la calle? Alguien que pasaba por la calle le preguntó que
le pasaba y se puso a buscar la moneda con ella. Después de un buen rato le
preguntó: “Señora, ¿dónde se le cayó la moneda?” Ella respondió: “en la
cocina”. “Y ¿por qué la busca en la calle?”. Porque la cocina esta oscura y en
la calle hay mucha más luz”. ¿No nos sucederá a nosotros algo parecido?…
Dios
nos dice que está en los que tienen hambre. Y nosotros empeñados en buscarlo en
los que están hartos de todo.
Dios
nos dice que está en los que tienen sed. Y nosotros empeñados en buscarlo en
los que les sobra el agua y abundan las cajas de cerveza.
Dios
nos dice que está en los desnudos. Y nosotros empeñados en buscarlo en los que
visten bien y a la última moda.
Dios
nos dice que está en los inmigrantes y forasteros. Y nosotros empeñados en
buscarlo en los que viven en los grandes y elegantes edificios de nuestras
ciudades.
Dios
nos dice que está en los enfermos. Y nosotros empeñados en buscarlo en los que
tienen muy buena salud.
Dios
nos dice que está en los ancianos que viven rumiando su propia soledad. Y
nosotros empeñados en buscarlos en los que viven bien acompañados y
divirtiéndose en las grandes tertulias.
La
gente no es mala. Sencillamente que no ha aprendido a ver con los ojos de Dios.
Por eso estos personajes de la parábola se quedan todos sorprendidos y todos
dicen lo mismo:
¿Cuándo
te vimos con hambre?
¿Cuándo
te vimos con sed?
¿Cuándo
te vimos desnudo, forastero o en la cárcel?
Nos
imaginamos que el lugar de Dios tiene que ser la Iglesia. Pero ni se nos ocurre
que Dios pueda estar en la cárcel. O que Dios pueda estar desnudo y tener
hambre. O que esté triste o enfermo, o pidiendo limosna a la puerta de la
Iglesia.
Jesús es cualquier persona que son su ejemplo nos pueda enseñar a vivir una vida comprometida y al servicio de los demás.